Demasiado tiempo pasó para volver a ver un cielo anegado de estrellas...
Vi Catedrales de piedra que eran mucho antes de que nada fuera.
Vi el abismo que separa a los seres humanos y ningún atisbo de puentes.
Vi el caos que provoca la ignorancia.
Vi demasiada belleza y muy poco talento para entenderla.
Vi muecas que antes eran sonrisas, erosionadas por el confort, la
costumbre y el miedo.
Es curioso todo el dolor que provoca
que habiendo tanto infinito,
el hombre elija siempre ponerse al borde del hombre.
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